La tortuga Frida murió por una infección en el 2021, justo cuando el Gobierno de Sheinbaum aplicó los recortes más severos al presupuesto para la compra de medicamentos para los zoológicos capitalinos.
Frida era una tortuga del Desierto del Bolsón de Mapimí (Gopherus flavomarginatus) endémica de la Comarca Lagunera de Chihuahua, Coahuila y Durango.
Esta especie ha llegado al punto crítico dónde podría extinguirse por completo, ya que se estimó en el 2017 que en la naturaleza solo quedan 2 mil 500 ejemplares.
Número que continúa disminuyendo a pesar de ser una especie prioritaria para la Nación.
A Frida la encontraron el 11 de mayo del 2012 en una de las calles más transitadas de Chihuahua. Se trataba de un ejemplar que fue saqueado de su hábitat ya que es ilegal tenerlas como mascotas.
La negligencia con la que la mantuvieron en cautiverio era evidente. Tenía una cicatriz de fractura en su caparazón además de una laceración reciente, probablemente provocada al ser lanzada de un vehículo.
En lugar de darle la atención veterinaria correspondiente para llevarla a la Reserva de la Biosfera Mapimí, dónde hay un programa de reproducción desde el 2008 y podía vivir en libertad, se decidió que fuera “donada” al Zoológico de Chapultepec.
Destacamos que el Delegado de Profepa en Chihuahua Sergio Zepeda Rodríguez, que participó en el “rescate” de Frida, fue implicado en una denuncia por corrupción en octubre del 2011 por el traslado ilegal de residuos peligrosos , así como traslado de animales sin autorización y sin darles seguimiento.
El Coordinador del Servicio Médico quien hizo la revisión de Frida para incorporarla al inventario de ejemplares fue Alberto Olascoaga actual Director del Zoológico de Chapultepec.
Quien aún conociendo la importancia del último ejemplar de Gopherus flavomarginatus de la Ciudad de México, no sólo la retuvo en las instalaciones sino que su descuido directo llevó a que Frida muriera por una infección tratable el 28 de diciembre del 2021.
La intención de que Frida perteneciera al Zoológico de Chapultepec era para reproducirla con el macho que tenían en las instalaciones.
El macho perteneció al intercambio que realizó el Zoológico de San Juan de Aragón con la Reserva de la Biósfera de la Michilía de Durango en 1981, en el que el Distrito Federal adquirió 2 tortuga Desierto del Bolsón de Mapimí a cambio de 5 cachorros de lobo mexicano.
Sobre la muerte de estos dos ejemplares no existen datos.
La permanencia de Frida como un animal de exhibición se justificó con el argumento de “fines educativos” pese a estar sola sin pareja. Sin embargo no existe ningún estudio, programa, ni siquiera registro fotográfico de Frida dentro de la información pública de la Secretaría del Medio Ambiente.
La muerte de Frida no se informó, aún cuando se trataba de un ejemplar único y de gran valor para la conservación y tan solo sirvió para que se sumará al cobro del seguro de 397 animales muertos en los zoológicos de la CDMX y que equivalen a 9 millones 240 mil pesos.
Para el Gobierno de Sheinbaum, Frida valía más muerta que viva.