Las mamás siempre nos cuidan y nos enseñan todo lo necesario para la vida. Es una de las tareas más arduas y que requieren a veces un esfuerzo extra, por eso te compartimos las cinco mamás más increíbles del Reino Animal
Oso Polar (ursus maritimus)
Las hembras embarazadas se refugian durante el invierno cuando nacen sus crías y no hibernan.
Se mantienen exclusivamente de la grasa acumulada, que les permite alimentar a los cachorros con leche materna hasta que las condiciones climáticas permiten que salgan de su madriguera.
Las crías permanecen al lado de su madre por mas de dos años.
La cacería de siglos anteriores pusieron a esta especie al borde de la extinción.
Ahora con el cambio climático, la extensión del territorio de los machos ha invadido al de las hembras con crías lo que lleva a enfrentamientos y una continua competencia por alimento.
Orangután
Las tres especies que comprenden este género de primates se distinguen por ser las más cariñosas con sus crías.
Sus crías dependen completamente de su madre por dos años en los que se mantiene en un constante contacto físico y permanecen a lado de ellas durante seis años más.
Las madres construyen nidos especializados para pasar la noche o para usarlos durante el día. Las crías ya una vez adultos harán sus propios nidos de la manera que lo hacían sus madres.
Las tres especies que comprende el este género son el de Borneo (Pongo pygmaeus), Sumatra (Pongo abelii) y Tapanuli (Pongo tapanuliensis).
Todas se encuentran en Peligro Crítico de Extinción a causa de la deforestación y el tráfico de especies.
Sus cría suelen ser cazados para convertirlos en mascotas exóticas, matando a su madre que no se desprende voluntariamente del pequeño orangután.
Elefante africano de la sabana (Loxodonta africana)
El embarazó de esta especie es el más largo, llegando a los 680 días ¡casi dos años!, en los que se prepara para dar a luz a una cría de 100 kg y de 90 cm de altura.
Su cría la cuidará por cinco años en los que le seguirá amamantando en compañía de la manada formada por otras elefantes y sus crías.
Actualmente esta especie se encuentra en Peligro de Extinción, debido a que por siglos fue cazada por su carne y el tráfico de marfil.
Aunque los esfuerzos internacionales han asegurado a varias manadas en santuarios y reservas naturales, los conflictos armados de las regiones africanas y la cacería ilegal no han permitido la recuperación de la población.
Guepardo (Acinonyx jubatus)
Los guepardos o chitas son animales solitarios, pero la vulnerabilidad de los cachorros hace que la madre se encuentre en un constante estado de alerta.
Suelen privarse de descanso para evitar que otros depredadores los ataquen, además traslada continuamente a sus crías a distintas madrigueras que prepara durante el embarazo.
Durante más de un año la madre se encuentra activa la mayor parte del día, perdiendo hasta la mitad de su peso para mantener a salvo de dos a cuatro crías.
Todas las subespecies de guepardos se encuentra en Estado Crítico de Extinción, principalmente por la destrucción de su hábitat que ha limitado el territorio de las hembras para reproducirse y tener madrigueras seguras.
Esta situación las ha expuesto a sus depredadores naturales como son las hienas y a la cacería furtiva, estimándose que solo tres de cada diez sobrevive hasta ser un adulto.
Pulpo de grandes profundidades (Graneledona boreopacifica)
La mayoría de pulpos son semélparos, un término para referirnos a los animales que solo se reproducen una vez y mueren, como lo son el salmón, las cigarras y algunas especies de mariposas o arañas.
Aunque el pulpo de grandes profundidades puede pasar hasta 4 años y medio cuidando sus huevos, siendo el periodo de mayor incubación.
Además de esto las hembras los colocan fuera del alcance de los depredadores entre las profundidades de 1,200 a 2,000 metros.
Poco se sabe de esta especie por pasar la mayoría de su vida en una profundidad difícil de estudiar.